Adiós al histórico oceanario de Mar del Plata tras más de tres décadas de actividad

El emblemático Aquarium de Mar del Plata tuvo su cierre definitivo este fin de semana, desatando sentimientos encontrados en la comunidad. Durante sus más de tres décadas de funcionamiento, fue un punto de interés tanto para turistas como para locales, pero llega a su fin debido a desacuerdos contractuales con los propietarios del terreno.
Este cierre afecta no solo a los visitantes, sino también al personal del lugar y a los animales que allí vivían. Parte importante de la conversación gira en torno a los delfines, muchos de los cuales nacieron en cautiverio y ahora serán trasladados a otros oceanarios en el mundo. Hay una preocupación especial por el tortugo Jorge, que parece tener un destino más esperanzador al ser liberado en aguas abiertas, donde será monitoreado.
El cierre del Aquarium también generó protestas de grupos animalistas, quienes desde hace tiempo venían solicitando la clausura de este y otros centros similares. Piden que los animales se trasladen a santuarios en lugar de ser enviados a otros parques temáticos o oceanarios. La preocupación principal es que estos animales puedan adaptarse a su vida en libertad sin graves riesgos.
En medio de la tristeza por el cierre, aún persiste la esperanza de que los animales que vivían allí encuentren lugares adecuados que les brinden la calidad de vida que merecen. Mientras tanto, el debate sobre el uso de animales en exhibiciones continúa, marcando el fin de una era en Mar del Plata.