Entrevista a Macu Basile: "Fueron muchos meses de no ver un peso"

Si hablamos de mujeres emprendedoras Macu Basile (@macubasile_) es un claro ejemplo de eso. Macu es la fundadora de We Are Velvet (@wearevelvet), una marca que hoy parece enorme pero que tuvo un comienzo cargado de esfuerzo y dedicación. Hoy en Resumido Macu nos cuenta cómo fue recorrer todo ese camino hasta llegar al gran presente que tiene su emprendimiento.

¿Cuál fue tu principal motivación para crear We Are Velvet?

M: En realidad arrancó casi de casualidad. Yo estaba buscando trabajo en relación de dependencia, y un día saliendo de una entrevista pasé por un local que vendía materiales para hacer accesorios porque quería hacerme unos aros que estaban muy de moda en ese momento. Como se necesita un mínimo de materiales para comprar, empecé a hacer de más. La gente veía los aros enormes que tenía y me preguntaba de dónde eran, y a mi me daba vergüenza decir que los hacía yo, hasta que me fui animando y puse en mi Facebook un álbum con lo que hacía. Creo que esa fue mi puerta en el mundo de emprender"

¿Cuándo supiste que esta creación era viable? 

M: La marca no era rentable al principio. Los aros dejaban un margen muy chiquito y no era un producto movilizador, o sea que si yo estaba en Devoto alguien de San Isidro no me iba a comprar unos aros porque le sale más caro el envío que el producto, por más que le guste. No fueron el producto movilizador, pero sí el puntapie para crear mi emprendimiento. Cuando empezó a escalar metí la ropa, y ahi sí fue un gran diferencial.

¿Tuviste que hacer algunas cosas especialmente creativas para conseguir los recursos? 

M: Los recursos los fui consiguiendo a medida que crecía. La primera inversión fue muy bajita con ahorros que yo tenía. Al principio era todo por encargo, entonces la persona me pagaba el 50% y cuando recibía el producto el otro 50%. De esa manera yo usaba esa mitad para pagar el producto y con la otra mitad ya empezaba a girar la rueda. De todas maneras me tomó mucho tiempo llegar a tener mi stock propio. Fueron muchos meses de no ver un peso porque todo lo reinvertía en el negocio.

M: Mi principal factor fueron mis papás, que toda la vida también fueron emprendedores.

M: Yo creo que el entorno social influyó muchísimo porque cuando arranqué no se usaba esto de vender a través de las redes sociales, entonces no tenía competencia y eso me ayudó a crecer más rápido. En el entorno personal tener el apoyo de mi familia fue clave para poder escalar.

¿Han cambiado tus metas y valores desde que creaste la marca?

M: Yo intento que la marca sea siempre como al principio, cuando el lema era "vestirte linda a un precio accesible". La realidad es que hoy el tema precios es muy difícil, pero cuando era chica me acuerdo que no había un término medio: tenías que vestirte en un shopping que era carísimo o ir a algún local de alguna avenida. Creo que no cambié, o al menos intento no cambiar los valores de la marca.

[caption id="attachment_27635" align="aligncenter" width="543"] macu creó una marca de 400 mil seguidores en instagram[/caption]

¿Cómo repartís tu tiempo?

M: Al día de hoy le dedico mucho tiempo a la marca porque me apasiona y me encanta, pero intento tener un equilibrio mucho más marcado que antes, o al menos que mi prioridad pase a ser mi familia.

¿Cuáles fueron tus mejores y peores momentos?

M: Para mi los mejores momentos son cuando no das abasto, porque significa que te está yendo bien, y creo que mi peor momento fue en pandemia. Fue muy duro porque acabábamos de abrir un nuevo showroom que no duró nada porque lo tuvimos que cerrar.

¿Para vos qué importancia tiene ser una referente de "mujer emprendedora"?

M: Ser una referente de mujer emprendedora es un desafío enorme pero es hermoso. Yo también sigo un montón de referentes emprendedoras y me ayuda, me sirve para el dia a dia. Es una contención, porque cuando uno está trabado tener un referente es importante y es necesario.

¿Si tuvieras que darle un mensaje a las marcas que están recién empezando cuál sería?

M: Que vayan firmes y seguros pero un paso a la vez. No hay camino, se hace al andar. Incluso hoy en dia digo "quiero hacer tal cosa, bueno voy de a poquito".