Un taxista fue víctima de un robo y tuvo que trasladar a dos policías para poder recuperar lo que le habían robado. El hecho fue en Rosario, al llegar a denunciar el hecho, no había patrulleros disponibles para asistirlo.
El taxista fue parado por un hombre de 50 años. Al frenar para tomar el viaje, aparecieron otras dos personas que también subieron al vehículo y le pidieron que los lleve hasta un cajero automático. Al empezar el recorrido, uno le puso un cuchillo en el cuello y le pidió la recaudación y su celular. Tras entregarle los 4 mil pesos y el teléfono, los delincuentes bajaron del taxi y se fueron caminando. El taxista denunciar pero al llegar, todos los patrulleros estaban dispuestos para custodias fijas, por lo que se ofreció a transportar en su auto a los agentes. Durante la insólita persecución, el conductor reconoció a los ladrones y los agentes lograron detenerlos a los pocos metros. Entre sus pertenencias recuperaron dos mil pesos y el teléfono celular. Los otros dos mil, solo Dios sabe dónde quedaron.
